Al otro lado es una historia de casualidades, de destinos entrecruzados, que son muchos y uno a la vez, y que en la mayoría de los casos sólo conducen al infortunio. Es el ejemplo
más claro de lo que significa estar en el lugar equivocado en el instante equivocado. También es la historia de la voluntad de querer darle la vuelta a un destino no deseado. Desde una prostituta turca que decide salir de la calle con la ayuda de un jubilado hasta una activista kurda que huye a Alemania, harta de la propia presión de los suyos, o un hijo que decide perdonar a su padre. No desentrañaré más de la trama, sólo diré que aunque aparentemente no existe un hilo conductor, la acción obligará
a los personajes a que intenten cambiar del resto.
Al otro lado le debe mucho a Before the rain, y en menor medida a Babel.
Trata de dos sentimientos que no están de moda y que no tienen muy buena prensa. La culpa, por hacer algo que debería haber hecho otra persona o por haber recibido un daño que no estaba destinado a nosotros. Pero el más importante, el que se echa en falta en estos días de furia, es el perdón.


Al otro lado le debe mucho a Before the rain, y en menor medida a Babel.
Trata de dos sentimientos que no están de moda y que no tienen muy buena prensa. La culpa, por hacer algo que debería haber hecho otra persona o por haber recibido un daño que no estaba destinado a nosotros. Pero el más importante, el que se echa en falta en estos días de furia, es el perdón.